SALES DE BAÑO YESNOW PARA EL PLACER Y LA SALUD
Por Giannina Hasbun
El disfrute de los baños con sales se remonta a la antigüedad y es propio de varias culturas. Tanto los griegos antiguos como los romanos tenían la costumbre de bañarse en lugares públicos no solo por salud sino también por placer.
«Igualmente, los chinos, los árabes y los egipcios usaban los baños para el placer y la relajación. «
Hoy en día, cuando el estrés de la vida diaria afecta nuestra salud física y mental, una buena idea para cuidarnos y consentirnos es darnos un baño con las sales de Yesnow que, además de relajarnos, nos ayudan a tener una piel sana.
Salud y belleza
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¿Pero que son las sales de baño y por qué utilizarlas?
Las sales de baño son compuestos inorgánicos muy similares en su apariencia a los granos de sal común y por eso se les llama así. Están llenas de nutrientes que benefician la piel pues contienen oligoelementos, es decir, sustancias químicas en forma de metales o metaloides, que son indispensables para el buen funcionamiento de las células. Utilizar las sales de baño es una excelente forma de remineralizar la piel que, recuerda, es el órgano más grande de nuestro cuerpo y merece, por ello, especial cuidado.
Las sales de baño se pueden utilizar de diferentes formas. Una de ellas, muy divertida, es llenar la bañera y mezclarla con las sales de baño Yesnow y sumergirnos ahí por un buen rato. Pero como no todas contamos con una bañera en la casa, las sales también se pueden utilizar echándolas en un recipiente con agua caliente que ponemos en el baño, primero para que el vapor que sale de allí entre por nuestros poros y, después, cuando ya el agua está más tibia, podemos echárnosla en la cara, brazos y piernas con una toallita.
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MADRES EMPRENDEDORAS: CONTAMOS CON UN INMENSO CAPITAL
Con frecuencia oímos las palabras emprendedor y emprendimiento no solo en los medios de comunicación sino también en las conversaciones cotidianas.
Estas palabras nos hacen pensar en muchas cosas: en personas que manejan una empresa pequeña o mediana, en aquellas que aprovechan las oportunidades de negocios que se les presentan, en personas que son muy “pilas”, como se dice comúnmente, y hacen que las cosas sucedan.
También oímos hablar diariamente de mujeres emprendedoras. Las hay reconocidas mundialmente como Susan Wojcicki, la directora ejecutiva de YouTube; Carolina Herrera, venezolana que ha posicionado una de las más importantes marcas de diseño a nivel mundial y, para el caso de Colombia, Beatriz Fernández, una de las dueñas de Crepes y Waffles.
Claro, las historias de estas mujeres son muy inspiradoras, pero si miramos nuestro caso, vemos que, en principio, pueden ser distintas a las nuestra: somos madres de familia, con hijos, esposos y ¡millones de cosas para atender!
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